Me ha parecido interesante escribir una entrada sobre las castañas y sus propiedades como alimento y aprovechar para reivindicar que es la castaña, y no la calabaza al estilo americano, la que ha formado parte de nuestras tradiciones en esta época del año. Es tiempo de castañas.
Los frutos secos deben su nombre a su bajo contenido en agua, y sin
embargo, la castaña es un fruto seco aunque casi el 50% de
su contenido es agua.
Además, la cantidad de grasa que tiene es
bastante inferior a la que tienen la mayoría de frutos secos.
No obstante, se trata de ácidos grasos monoinsaturados, es decir, de grasas
buenas para la salud.
Ambas características hacen que las propiedades de las castañas se
asemejen más a las de los cereales que
a las de los frutos secos en general.
Un alimento muy completo
Contrariamente a la creencia extendida de que las castañas engordan y
pese a que su contenido en hidratos de carbono
es alto, las castañas aportan muy
pocas calorías. Además, se trata de hidratos
de carbono complejos, los más saludables, ya que el organismo los
absorbe lentamente estabilizando los niveles de glucosa en la sangre.
Son muy ricas en fibra, lo
que las hacen ideales para personas estreñidas. Pero hay que tener en cuenta
que para que la fibra actúe adecuadamente es necesario beber mucha agua.
Las castañas también aportan proteínas y
son, además, fuente de vitaminas E, B3, ácido fólico
y varios minerales entre
los que destacan el potasio, el fósforo, el
calcio y el magnesio.
Destacan por su alto contenido en potasio,
lo que las hacen muy recomendables a las personas que padecen hipertensión,
ya que éste está implicado en la regulación de la hipertensión arterial en
diversos niveles y participa en el metabolismo del agua, por lo cual también
actúa favorablemente en casos de retención de líquidos.
Uno de los inconvenientes de las castañas es que pueden resultar pesadas
para el estómago y provocar flatulencias. Desde luego, no es
conveniente tomarlas crudas. Para evitar estos
malestares, se recomienda masticarlas muy bien antes
de tragarlas y si las vas a tomar cocidas, he leído un truco
que puede ayudar a facilitar la digestión y evitar los gases:
añadir unos granos de anís al agua.
Sus propiedades nutricionales y reconstituyentes (agua,
hidratos de carbono, proteínas, vitaminas y minerales) hacen de la castaña un alimento
ideal para todas las personas, y en especial para ancianos,
niños, estudiantes, deportistas, personas convalecientes o que necesiten un
refuerzo extra por estrés o depresión, mujeres embarazadas o durante la
lactancia, en casos de anemia...
Y cómo es tiempo de castañas, te traigo una receta de Flan
de Castañas que he encontrado en Pinterest.
Es un modo diferente al usual de tomarlas y también de variar el tipo de flan
al que estamos acostumbrados.
Espero que tras haber leído esta entrada empieces a ver las castañas
como un alimento a tener en cuenta por sus propiedades nutricionales. Ya sabes,
es tiempo de castañas, ¿las sueles
tomar? ¿Cómo te gustan más?
Fuentes
6 comentarios:
buenas tardes Alimenta.
Que ricas estan las castañas y que buenas son (lo desconocia hasta ahora)
Un post muy bueno.
yo tomo las castañas en pure con asado... riquisimo.
Buenas tardes.. castañas ummmm que recuerdos de mi niñez me encantan asadas
Que buena pinta tiene el flan de castañas y que rico y nutritivo.
Me encantan todos tus articulos.
Asadas y cocidas es lo más habitual, pero existen otras maneras de prepararlas, en puré como dice Pepa, en flan como en la receta, y ... Es tiempo de castañas así que, aprovechémoslo. ¡Qué disfrutéis del fin de semana!
que buenas estas las castañas y que de propiedades tienen.
Yo os recomiendo conejo con castañas, pudig de castañas, riquisimo
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